La abogada Lorena Arias, representante legal de un grupo de familiares de los tripulantes del ARA San Juan, aseguró hoy que serán querellantes en la causa iniciada por el presunto espionaje realizado sobre ellos por parte de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), mientras el buque estaba desaparecido.
Arias, quien encabeza junto a la abogada Valeria Carreras una de las querellas de la causa que investiga el hundimiento, ocurrido el 15 de noviembre de 2017 en el Atlántico Sur, dijo que intervendrán en el expediente iniciado en la Justicia Federal de Mar del Plata tras la denuncia presentada esta mañana por la interventora de la AFI, Cristina Caamaño.
«Sin dudas, vamos a intervenir. En las próximas horas vamos a tener más precisiones respecto de la causa, y a partir de eso veremos cómo avanzar, pero desde ya que vamos a estar al frente», explicó Arias a Télam.
La abogada precisó que junto a Carreras, el 11 de junio último habían realizado una presentación ante el juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena, en el marco de la causa por presuntas maniobras de espionaje ilegal de la AFI durante el Gobierno de Cambiemos.
En su presentación, solicitaban que se investigara si estas tareas de seguimiento habían alcanzado a allegados y familiares de los submarinistas.
«Ahora tenemos que ver el expediente, para saber si esta denuncia es a requerimiento de aquella presentación en Lomas de Zamora. Si es así, nosotros técnicamente ya somos parte de la causa, como denunciantes. Y en caso de que sea un expediente que va por un camino separado, vamos a presentarnos como querellantes en la nueva causa», explicó.
En ese sentido, recordó que desde la querella que encabeza junto a Carreras, habían realizado en 2018 denuncias por posible espionaje sobre familiares, tanto en los juzgados federales de Comodoro Py, como en el de Caleta Olivia, donde se instruye la investigación principal por el hundimiento del buque con 44 tripulantes a bordo.
«Denunciamos la sospecha que tenían las esposas de los submarinistas de que eran espiadas. Pedimos que se investigara, y tanto la causa en Comodoro Py como en Caleta siguen abiertas, pero la verdad es que no se avanzó», señaló.
Arias expresó además que «produce una sensación horrible la confirmación de una sospecha que tantos familiares relataban y que era difícil de explicar», y señaló además que «resulta inimaginable pensar que se haya olvidado a tal punto la condición de víctima de estas personas, como para aplicar sobre ellas maniobras de este tipo». (Télam)
«Manoseados»
La madre del cabo principal, Luis García, uno de los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan, que naufragó en el Atlántico Sur el 15 de noviembre de 2017, aseguró este miércoles que los familiares de las víctimas se sienten «manoseados y basureados», tras la denuncia.
«Nos sentimos todos manoseados, basureados. No les importó nuestro dolor. No les interesó nada en lo afectivo. Jugaron con nuestro sufrimiento y nuestros sentimientos», expresó María Victoria Morales en declaraciones a la agencia Télam.
La madre de García aseguró que muchos tenían «fuertes sospechas» de que eran espiados, y recordó que se presentó una denuncia en la Justicia Federal, «después de notar que desaparecían mensajes en los teléfonos celulares de los familiares», desde marzo de 2018, cuando los restos del buque continuaban desaparecidos.
«Siempre nos sentimos observados, y de hecho lo hemos denunciado en la Justicia, aunque nunca se investigó. Pero tener una confirmación es muy feo. Es agregar dolor al dolor. De todos modos, eso nunca nos frenó, porque sabíamos que no estábamos haciendo nada malo, solo pedíamos y pedimos aun que se investigue qué fue lo que pasó», dijo.
Por su parte, Isabel Polo, hermana del cabo primero Daniel Alejandro Polo, señaló que «de a poco las cosas salen a la luz», y recordó que algunos familiares denunciaron las sospechas sobre posibles maniobras de espionaje, durante la presentación realizada por el exministro de Defensa Oscar Aguad, en el marco de la comisión bicameral del Congreso que investigaba el hundimiento, en abril de 2018.
«Muchos lo dijimos, y no nos creyeron. No se investigó nada. Es increíble que la AFI tuviera tiempo para esas cosas. Esperemos que ahora sí se investigue», dijo a Télam.
Finalmente, Andrea Mereles, esposa del suboficial segundo Ricardo Gabriel Alfaro Rodríguez, expresó: «Siempre tuvimos la sospecha. Yo siempre me sentí que había sido espiada, y le pasaba a muchas madres y esposas. Era evidente que nos controlaban».
«Además de pasar el dolor que pasamos, éramos hostigados, manoseados. Ojalá que con esta denuncia salga todo a la luz, y que sean castigados todos los que tengan que serlo», señaló. (Télam)