El jefe de Gabinete de Ministros de la Nación, Santiago Cafiero, dijo hoy que la Argentina está viviendo una «doble crisis» por la pandemia de coronavirus que afectó la economía del país y del mundo y por las dificultades de la balanza de pagos que se iniciaron durante el gobierno del ex presidente Mauricio Macri, en 2018 y 2019.
Además, defendió la política implementada por la administración de Alberto Fernández para paliar la grave situación económica, al tiempo que cuestionó la deuda contraída con el Fondo Monetario internacional por 44.000 millones de dólares y elogió la negociación con los fondos privados de inversión.
«A la crisis de la balanza de pagos que se dio en 2018 y 2019, se sumó la crisis de la pandemia. Es una doble crisis la que estamos viviendo», expresó Cafiero al brindar su segundo informe de gestión ante la Cámara de Senadores.
El jefe de Gabinete, quien utilizó cincuenta minutos de los sesenta que estaban estipulados para hablar ante el hemiciclo de la Cámara Alta, aclaró que el gobierno «no viene a poner excusas diciendo que esto es una crisis global, que evidentemente lo es».
«Lo que estamos buscando es que se reconozca con la gravedad que corresponde, la envergadura que tiene, el grado de esta crisis del coronavirus», afirmó.
Cafiero también agregó que «es cierto que no vinimos a echarle la culpa a nadie, sino a poner las cosas en orden y ver cómo podemos salir adelante» y cuestionó al gobierno de Macri, al que describió como una administración que «abrazó ideológicamente, culturalmente y con una creencia de que ese era el modelo para la Argentina: chico y de exclusión».
«El FMI asistió a la Argentina en 44 mil millones de dólares para tratar de salvar un modelo de especulación y de financialización de la economía. Nosotros vinimos a recuperar a la Argentina», sentenció.
Al respecto, recordó que el país «tiene por delante la renegociación con el Fondo», mencionó que «se iniciaron conversaciones», pero dijo que se «necesita recomponer el tejido productivo y el desarrollo de los argentinos».
«Necesitamos crecer para poder pagar. Vamos a negociar de cara a los argentinos y de cara al Congreso», anunció.
Por otro lado, elogió la negociación llevada adelante por el ministro de Economía, Martín Guzmán, ante los fondos privados de inversión que permitió una adhesión del 99 por ciento de los deudores al pago diferido de esa deuda.
«Lo que se consiguió es histórico», aseguró Cafiero y apuntó contra quienes cuestionaban esa negociación.
«El único fracaso que ven los que criticaban la negociación es cada mañana cuando se miran al espejo», fustigó.
Asimismo, remarcó que el gobierno argentino «no reestructuró la deuda para volver a los fracasos que pusieron en peligro la soberanía de la Argentina» y elogió el gobierno de Fernández, a quien calificó como «un estadista» que «sabe cuáles son los intereses de la nación en lugar de deponerlos por los vientos de la política internacional».
«Avanzamos con pie firme y negociamos con dureza, pero nunca claudicamos ni en la soberanía ni nos dejamos pisotear la autoestima», aseguró.
Tras afirmar que la deuda adquirida durante el gobierno de Mauricio Macri sirvió «para sostener un modelo que sólo generó más pobreza y exclusión», recordó que «entre 2020 y 2024 la Argentina iba a enfrentar vencimientos por treinta mil millones de dólares».
«Gracias a la reestructuración, la deuda tiene un perfil mucho más sostenible. En cuatro años debemos pagar sólo 4.500 millones de dólares», aseveró.
Además, remarcó que según las proyecciones del gobierno anterior, se debían pagar en 2021 casi dos puntos del PBI en deuda pero agregó que, gracias a la reestructuración de la deuda «se pueden volcar esos recursos al Presupuesto Nacional».
Al respecto, destacó que en el Presupuesto 2021 que aún debe aprobar el Congreso Nacional se destinarán 800 mil millones de pesos a infraestructura, un aumento en la inversión de la salud pública del 49 por ciento y del once por ciento en educación.
«Todo esto es posible porque los recursos de la Nación no se fueron por la canaleta de la deuda», destacó.
Finalmente, Cafiero dijo que «es central que se avance en el diálogo democrático de los distintos poderes» para la «articulación de la búsqueda de mejores proyectos para llevar adelante la agenda de desarrollo que aún está inconclusa».
«En el camino, la pandemia a todos nos sacó algo. Nos empujó al desánimo social y personal. No la ayudemos en esta tarea buscando la ventaja política oportunista. Estamos en el camino indicado. Con nuestras disidencias podemos encontrar el camino adecuado para levantarnos, una vez más», sentenció. (Télam)