La rosarina Nadia Podoroska no pudo prolongar su mágico momento en París y quedó a tan solo dos escalones de la gloria, al caer hoy en una de las semifinales de Roland Garros, tercer torneo de Grand Slam del año, ante la juvenil polaca Iga Swiatek por un holgado 6-2 y 6-1.
Podoroska, nacida en Rosario y ubicada en el puesto 131 del ranking mundial de la WTA, no pudo tomar la iniciativa durante todo el partido y fue fácil presa de Swiatek (53), de 19 años, para despedirse de Roland Garros luego de 1 hora y 10 minutos de juego, en la cancha central Philippe Chatrier del complejo ubicado en el barrio parisino de Bois de Boulogne.
La rosarina, de 23 años, sumó una experiencia invalorable en la mejor actuación de su carrera, que le reportará un ascenso hasta el puesto 47 del ranking mundial que la WTA dará a conocer el próximo lunes, y además ganancias por 420.250 euros que le permitirán asumir sus próximos compromisos más desahogada desde lo económico.
Por su parte, la polaca nacida en Varsovia confirmó todo lo bueno que había insinuado cuando eliminó en octavos de final a la rumana Simona Halep (2), campeona de Roland Garros en 2018, y asumirá un nuevo desafío en la final del sábado.
En el partido decisivo, la polaca confrontará ante la estadounidense Sofía Kenin (6), quien superó en la otra semifinal del certamen parisino a la checa Petra Kvitova (11) por 6-4 y 7-5, luego de 1 hora y 46 minutos de enfrentamiento.
Swiatek se instaló en la final sin perder ningún set en todo el torneo y con un total de 150 ‘winners’ (23 ante Podoroska), aunque se encontrará el sábado con una campeona de Grand Slam: Kenin, quien este año ganó Australia.
Para Podoroska se trató de las dos mejores semanas de su carrera, ya que ingresó al cuadro principal proveniente de la clasificación e igualó a cuatro antecesoras argentinas que también se habían instalado entre las cuatro mejores en París: Raquel Giscafré, Gabriela Sabatini, Clarisa Fernández y Paola Suárez, la más reciente en el 2004.
La rosarina nacida y criada en el barrio de Fisherton padeció desde el primer game hasta el último, ya que jamás pudo descifrar la derecha de su rival ni ponerla en apuros, de hecho, dispuso de cinco breaks points durante todo el partido y apenas pudo aprovechar uno en el segundo set.
La polaca lastimó con su mejor golpe, la derecha pesada con la que tiraba ‘winners’ desde cualquier sector de la cancha, así arrancó en ventaja por 2-0 con un quiebre de servicio y luego estiró a 3-0 con su saque.
Podoroska recién ganó su primer punto a los 17 minutos, cuando logró sacar a la europea de su zona de confort y cargó todo el juego sobre su revés, aunque al mismo tiempo conectó pocos primeros saques y, tras ceder por segunda vez el servicio, dejó escapar el set por 6-2 en 36 minutos.
Swiatek mantuvo la iniciativa en el segundo parcial, siempre apoyada en su derecha (un golpe que armó corto, con mucha aceleración), así quebró de nuevo a la rosarina en tres ocasiones (2-0, 4-0 y 5-1) para dejar la victoria al alcance de la mano, sin inmutarse cuando cedió por única vez su servicio en el 4-1 a favor.
Podoroska no descifró el enigma que le planteó la polaca, pese a que intentó variar sus golpes y buscó mejores ángulos para incomodarla (eso la hizo jugar sin margen y falló bastante) y así el segundo set se fue rápidamente por 6-1 para cerrar un partido en el que siempre corrió de atrás en el marcador.
Más allá de la derrota, para la «Peque» la edición 2020 de Roland Garros, con público limitado en las tribunas y protocolos sanitarios obligatorios para mitigar los efectos del coronavirus, marcará un antes y un después.
La «Peque» rindió en un nivel sobresaliente desde que logró ingresar al cuadro principal tras haber sorteado tres partidos de la clasificación, ante la polaca Magdalena Frech (157), la rumana Jacqueline Cristian (166) y la china Xinyu Wang (146), y una vez adentro hilvanó lo mejor de su carrera con victorias inolvidables sobre la belga Greet Minnen (111), la kazaja Yulia Putintseva (27), la eslovaca Anna Schmiedlova (161), la checa Barbora Krejcikova (114) y por último la ucraniana Elina Svitolina (5).
Podoroska, clasificada para los Juegos Olímpicos de Tokio merced a su medalla de oro en los Panamericanos de Lima 2019, rompió todos los pronósticos y llegó hasta donde pudo, en un Grand Slam que vio como las grandes favoritas se despedían rápido, tales los casos de la rumana Halep, la bielorrusa Viktoria Azarenka, la española Garbiñe Muguruza y la estadounidense Serena Williams.
La tenista entrenada por Juan Pablo Guzmán y Emiliano Redondi se llevó de París una actuación histórica y generó que en Argentina se volviera a tener en cuenta al tenis femenino, algo que no sucedía desde hace más de tres lustros.
Su actuación, sumada a la de Diego Schwartzman, semifinalista en el cuadro masculino, recordó la época de «La Legión» o más reciente los éxitos del tandilense Juan Martín Del Potro, campeón del US Open en 2009 y semifinalista en Roland Garros en 2018.