La referente del Programa de Abordaje Integral de la Violencia de la Dirección de Salud Mental y Adicciones del Siprosa, psicóloga Carolina Salim, habló sobre la labor que desde el área se desarrolla en el marco de esta fecha de concientización sobre el flagelo y a lo largo de los 10 años transcurridos desde su creación en 2012.
Este día tiene por objetivo conmemorar y valorizar acciones de prevención dirigidas a erradicar la violencia contra la mujer: “Tenemos una gran responsabilidad como Sistema de Salud en el abordaje que trabajamos hacia las víctimas de violencia en los efectos, ya que a nuestros servicios llegan las consecuencias. Podemos trabajar en prevención con indicadores indirectos, normativas y lineamientos, pero sobre todo somos receptores de derivaciones de otras instituciones y de las consultas que surgen de manera espontánea a causa de situaciones de violencia explícita”.
En este sentido Salim habló de una doble tarea, responder a los efectos con tratamientos de abordaje integral como lo establecen las normativas de trabajo generales en la temática y a la vez aprovechar la oportunidad de la detección en la consulta en las que tantas veces no existe una verbalización de las situaciones de violencia: “En la mayoría de estos vínculos y situaciones de vivencias crónicas de violencia, una instancia de reconocimiento no es la primera medida, a veces debe pasar mucho tiempo ya que no es fácil aceptar, especialmente cuando hay un vínculo afectivo con una persona que uno elige para garantizar un futuro donde prime el afecto, que se está en una situación violenta”.
El primer punto o paso en estos casos, resaltó la referente, es el reconocimiento de la paciente de estas situaciones de daño que van generando implicancias y consecuencias posteriores muy poco visibilizadas por la sociedad en general: “Vivimos en una sociedad que avala y tiene una fuerte base de cultura machista y patriarcal, que justifica intervenciones y acciones violentas hacia la mujer, por otra parte, tenemos la responsabilidad como institución de eliminar también las propias prácticas institucionales para poder trabajar con quien nos necesite en pos de encontrar respuestas integrales”.
Esta fecha, sobre todo, pero todos los días del año, nos vuelven a reafirmar una línea de trabajo en la atención y abordaje integral, así como en las instancias preventivas de estos vínculos violentos, que en la mayoría de los casos son intrafamiliares, entre personas o parejas que conviven o ex parejas. A nivel estadístico 1 de cada 3 mujeres en Argentina declararon o llegaron a algún servicio institucional con alguna situación de violencia física, psicológica, emocional o sexual y es esto justamente lo que llega a los centros de salud, los efectos, la lesión, el trastorno mental, la depresión, el intento de suicidio o el abuso sexual incluso dentro de la pareja”, reflexionó la psicóloga, a la vez que puntualizó se requiere de mucho compromiso y tolerancia a la frustración en la labor diaria.
Para la articulación diaria de la tarea el Programa cuenta con guías clínicas y protocolos provinciales transmitidos constantemente y de manera transversal a toda la red sanitaria. En la materia se capacita en cada punto de la provincia a los equipos de salud, para que se puedan aplicar los procedimientos dentro de cada servicio: “No es lo mismo la estructura de un hospital que cuenta con otros recursos y accesibilidad, a un Caps del interior, por eso la idea desde el primer momento cuando se aprobó la Ley 26.485 que insta a todas las instituciones del Estado a trabajar en la materia, fue repensar cómo implementar la legislación a nivel sanitario, para lo que se crearon anexos de comunicación a las autoridades por los que cualquier representante de salud pueda comunicar los casos a la autoridad correspondiente sin salir de su servicio”.
Como lineamiento y objetivo fundamentales del programa, se encuentra la capacitación de los equipos de salud en base a la planificación anual por Áreas Operativas y Programáticas de la Dirección General de la Red de Servicios y a la información que Vigilancia Epidemiológica facilita sobre las zonas que se detecta presentan más casos de violencia: “Trabajamos con esos equipos para evaluar el aumento como la baja de casos y con aquellos servicios que solicitan intervenciones puntuales. Nuestra idea es que el programa se traslade a los servicios para transmitir los lineamientos con los que trabajamos”.
Cabe destacar que además de los instructivos y protocolos, desde el año pasado se iniciaron capacitaciones en el marco del cumplimiento de la Ley Micaela que insta a todos los referentes institucionales a capacitarse en violencia de género, en la comunidad trans y violencia en general, lo cual refuerza los lineamientos del programa a nivel provincial y normativo: “Ya llevamos tres grupos capacitados desde mandos directivos a mandos medios, con referentes de áreas programáticas y operativas. La idea es continuar con estos espacios formativos para que la mayoría de los referentes del Sistema de Salud estén formados en prevención de violencia de género”.
Líneas de acción en las que el Programa trabaja actualmente:
-Guía de práctica clínica: Diagnóstico y abordaje de la violencia hacia la mujer desde el ámbito sanitario.
-Protocolo de actuación elaborado por la red provincial contra la violencia hacia la mujer.
-Instructivos para la comunicación y/o denuncias judiciales desde hospitales y red de primer nivel de atención.
-Protocolo interinstitucional para el abordaje integral de hijos/as y referentes de víctimas de femicidio elaborado por el Siprosa y el Ministerio de Desarrollo Social.