La Policía Federal Argentina (PFA) realizó una serie de operativos en el barrio porteño de Puerto Madero en el marco de una causa que investiga a una banda que se dedica a ingresar al país a mujeres rusas embarazadas, a quienes les conseguían documentos apócrifos a cambio de dinero, informó este sábado esa fuerza.
La investigación, que está a cargo del Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal N° 1 de María Romilda Servini, llegó el pasado jueves a dos viviendas ubicadas en torres de lujo, donde residían los presuntos líderes de la banda, a quienes no se detuvo pero se les secuestró elementos de interés para la causa.
Uno de los allanamientos fue en una torre de departamentos situada en Juana Manso al 500 y el otro en un edificio en Azucena Villaflor al 500.
«Se secuestraron en ambos domicilios elementos tecnológicos como notebooks, tablets, unidades de almacenamiento externo (discos- USB), teléfonos celulares, documentación personal, documentación migratoria, certificados policiales, dinero en moneda extranjera (dólares y euros) y moneda nacional», informó la PFA en un comunicado.
La causa judicial se inició a raíz de una denuncia en la División de Delitos Federales de la PFA, en la que «una mujer advirtió sobre maniobras irregulares en el ingreso de ciudadanas rusas a punto de dar a luz en el país, el nacimiento de ellos y el otorgamiento de trámites migratorios», indicó el comunicado.
La jueza Servini requirió la intervención de la División Asuntos Migratorios de la Superintendencia de Investigaciones Federales, que logró «identificar la primera línea de esta organización delictiva» que «lucraba con familias rusas de alto poder adquisitivo, quienes para ingresar al país pagaban desde 20.000 a 35.000 dólares», se detalló.
Tras el ingreso a la Argentina, la organización designaba un centro de salud para el nacimiento de los bebés, que «se convertía en ciudadano argentino y mediante ello gestionaban con documentación apócrifa trámites de radicación y ciudadanía argentina en tiempo récord», añadió el comunicado de la PFA.
«El nacimiento de sus hijos y obtención de la ciudadanía era con el solo fin de poder emigrar a otros países, como los de Europa o Estados Unidos, ya que el pasaporte ruso no posee la aceptación de ingreso en esos países», aportó el comunicado. (Télam)