Organizado en tiempo récord y bajo una atmósfera de sostenido entusiasmo por la conquista en Qatar 2022, la XXIII Copa Mundial Sub 20 de la FIFA se jugará en Argentina desde el sábado próximo hasta el 11 de junio en busca del sucesor de Ucrania, consagrado hace cuatro años en Polonia.
Un total de 504 futbolistas de 24 seleccionados juveniles representantes de las seis confederaciones del fútbol disputarán 52 partidos en las cuatros sedes designadas: el Estadio Único Madre de Ciudades de Santiago del Estero, el Estadio Bicentenario de San Juan, el Malvinas Argentinas de Mendoza y el Diego Armando Maradona de La Plata.
Argentina, local en la XIII edición en 2001, se propuso para recibir el Mundial después de que la FIFA le retirara el derecho de organización a Indonesia el pasado 29 de marzo por un conflicto político.
El país asiático, con un 88% de musulmanes en su población de 235 millones de habitantes, rechazó la bienvenida a la selección de Israel, clasificada por primera vez en la historia.
El presidente de la AFA, Claudio «Chiqui» Tapia, propuso de inmediato al país como alternativa y el Gobierno argentino brindó su respaldo a un proyecto que generará un impacto económico de 600 millones de dólares, según las estimaciones del Ministerio de Hacienda.
La organización de este torneo se presenta además como una prueba piloto para obtener la sede del Mundial 2030, edición del centenario, por la que Argentina trabaja en forma conjunta con Uruguay, Paraguay y Chile, bajo fuerte apoyo de la Conmebol.
Y significa a la vez una segunda oportunidad para el equipo de Javier Mascherano, que había quedado afuera por su eliminación en la primera ronda del Sudamericano que se disputó en Colombia a principios de año.
El excapitán argentino revisó su renuncia al cargo a partir de la reubicación del torneo en la tierra de los campeones del mundo y del convencimiento que fomentaron Tapia, Lionel Scaloni y hasta el propio Lionel Messi.
Argentina, aun con su decepcionante actuación en el certamen clasificatorio, no deja de considerarse en el lote de favoritos junto a Brasil -campeón sudamericano-, Uruguay, Inglaterra -titular europeo-, Italia y Francia.
La «Albiceleste» es la máxima ganadora de campeonatos mundiales de la categoría con seis estrellas, una más que Brasil, que fue el último sudamericano en levantar la copa en la edición Colombia 2011.
La media docena de títulos (1979, 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007) fue lograda por cuatro técnicos (César Menotti, José Pekerman -3-, Francisco Ferraro y Hugo Tocalli) y contiene en los pósters a leyendas y grandes figuras del fútbol argentino.
De Diego Maradona a Messi, pasando por Ramón Díaz, Juan Pablo Sorín, Walter Samuel, Esteban Cambiasso, Scaloni, Pablo Aimar, Juan Román Riquelme, Javier Saviola, Maximiliano Rodríguez, Andrés D’Alessandro, Sergio «Kun» Agüero, Ángel Di María y Sergio «Chiquito» Romero, por citar algunos.
El seleccionado de Mascherano se apoya en los «europibes», una camada de jugadores que militan en el Viejo Continente y que incluso, en algunos casos, hicieron allí su formación profesional.
Máximo Perrone (Manchester City), Matías Soulé (Juventus), Valentín Carboni (Inter), que llevará la emblemática camiseta número 10, y Luka Romero (Lazio) son sus principales exponentes.
Por decisión de sus clubes, no fueron cedidos Alejandro Garnacho (Manchester United), Nicolás Paz (Real Madrid) y Facundo Buonanotte (Brighton), una dificultad que también experimentaron Brasil con Endrick (Palmeiras) y Víctor Roque (Athlético Paranaense); Uruguay, con Álvaro Rodríguez (Real Madrid) y Francia con más de 20 negativas.
Brasil, de todos modos, cuenta con el futbolista más cotizado de la Copa del Mundo: el talentoso mediocampista Andrey Santos, por quien Chelsea pagó 12,5 millones de euros a principios de año.
La perla «carioca» permanece en su club de origen, Vasco da Gama, a la espera de su incorporación a Stamford Bridge, que podría darse después del Mundial para el inicio del ciclo técnico del argentino Mauricio Pochettino.
La Copa Mundial Sub 20 comenzará el sábado con cuatro partidos válidos por los grupos A y B. Guatemala-Nueva Zelanda (15:00) y Argentina-Uzbekistán (18:00) jugarán en Santiago del Estero; mientras que Estados Unidos-Ecuador (15:00) y Fiji-Eslovaquia (18:00) lo harán en San Juan.
Las cuatro zonas restantes las componen: Colombia, Israel, Japón y Senegal (C); Brasil, Italia, Nigeria y Repúblca Dominicana (D); Inglaterra, Irak, Túnez y Uruguay (E) y Corea del Sur, Francia, Gambia y Honduras (F).