Los periodistas holandeses Jan Van der Putten, autor de la histórica entrevista a las Madres de Plaza de Mayo durante el Mundial de Fútbol de 1978, y Frits Jelle Barend, quien se hizo pasar por futbolista neerlandés para preguntarle al dictador Jorge Rafael Videla por los desaparecidos, participaron este martes en la ciudad de Buenos Aires de un encuentro con periodistas donde contaron sus experiencias y destacaron el valor de las Madres de Plaza de Mayo, a quienes consideraron «heroínas».
Van der Putten y Barend encabezaron un encuentro organizado por el Centro Ana Frank Argentina (CAFA) en el que compartieron un almuerzo con periodistas nacionales e internacionales como una de las primeras actividades de una profusa agenda que desarrollarán durante su estadía en el país, hasta el lunes próximo.
«Entendimos que ese mundial no fue un mundial de fútbol sino un mundial para defender el régimen de (Jorge Rafael) Videla, como lo fueron los juegos Olímpicos de 1936 en Berlín para defender a (Adolf) Hitler», expresó Barend a los periodistas sobre el dilema que se instaló entre los colegas acerca del «verdadero rol» que cumplía aquel torneo internacional de fútbol en el contexto de la cruenta dictadura que vivía el país desde el 24 de marzo de 1976.
La experiencia de Barend en la Argentina
Barend, en 1978, viajó junto a dos colegas a cubrir el mundial para la revista holandesa Vrij Nederland. Mientras a su compañero Henk Van Dorp le tocaba la cobertura deportiva, él tenía a su cargo la política. El 1 de junio de 1978, durante la jornada inaugural del Mundial, Barend no dudó y fue a la Plaza de Mayo a ver a las Madres.
«Me sorprendió la quietud de la ciudad, la Plaza desierta, todos estaban viendo el partido. Y de golpe a las 4 en punto aparece un grupo de unas 20 o 30 mujeres. Me pedían que escribiera sobre sus hijos y seres queridos con desesperación. Para mí esas mujeres son heroínas», relató Barend sobre el acercamiento al grupo de Madres de Plaza de Mayo.
Y continuó: «Al poco tiempo aparecieron unos hombres y me dijeron ‘son locas’, yo sabía que no era así. Nunca había vivido algo similar en mi vida. Volví al hotel y le pedí a mi compañero dormir en la misma habitación por si acaso».
Barend, sin embargo, fue por más. Junto al fotógrafo del semanario se hicieron pasar por futbolistas del equipo holandés para ingresar a la cena de clausura e intentar llegar a Videla.
«Soy periodista y pensaba que era mi obligación, como tal, hablar con él. Lo tenía a diez metros de distancia, era muy difícil acercarse a esa gente, no podía desperdiciar la oportunidad», explicó Barend en diálogo con Télam sobre el momento que tomó la decisión de ir a hablar con uno de los máximos responsables de lo que estaba ocurriendo en ese momento en el país.
«Tomé el grabador y me presenté con él como periodista de Holanda. Primero le dije ‘felicidades por el mundial’ y le consulté si estaba contento. Inmediatamente después le pregunté ‘¿Dónde está la gente desaparecida?'», repasó Barend.
Videla se desentendió de la pregunta diciendo que «eran mentiras», pero el periodista insistió: «Hablé con esas mujeres, las ‘madres locas’ y no dicen mentiras».
Luego la conversación fue interrumpida, Barend rápidamente salió del lugar con el fotógrafo. En el apuro, su colega se olvidó la documentación en su saco, pasaporte, tarjetas. No pudieron salir del país esa noche según lo previsto, lo harían recién unos días después, contó.
«Ayer volví a la Plaza de Mayo, es muy emocionante estar acá. Como pensaba en aquel momento y lo sostengo, es la obligación de un periodista escribir la verdad y defender los derechos humanos», dijo Barend.
Van der Putten y su visita a Madres
Quien también iría a hablar con las Madres de Plaza de Mayo sería Van der Putten, pero él lo haría con cámara y micrófono en mano en lo que se convertiría en la primera entrevista audiovisual hecha a las Madres durante su ronda de los jueves que recorrió el mundo.
«Éramos periodistas extranjeros en un país muy lejano y ver la desesperación de esas madres que nos pedían ayuda como única solución porque, como ellas mismas relatan, todos los pilares del poder -embajadas, ministerios, justicia, policía- les daban la espalda, fue algo estremecedor», expresó Van der Putten quien realizaba esa entrevista como una colaboración con la Televisión holandesa VARA.
Van der Putten sostuvo en declaraciones a Télam que en ese momento «no midió los riesgos», él «quería estar en Argentina para contar el momento trágico que se estaba viviendo» y cuando desde VARA le pidieron hacer la entrevista a las Madres, la respuesta fue contundente: «Lógico que lo voy a hacer, esto se debe hacer».
Van der Putten explicó que si bien se encontraba viviendo en Venezuela, sabía desde antes de la existencia de las Madres porque seguía de cerca las noticias de Argentina y, además, tenía muchos periodistas conocidos que habían desaparecido.
«Durante la entrevista no tuve miedo. Pensaba que no iba a ser tan peligroso porque los ojos del mundo estaban dirigidos a Argentina por el mundial, con la atracción que genera el fútbol en el mundo y más aún aquí«, refirió el periodista.
Sin embargo, hacia el final del mundial una de las compañeras de su equipo de la radio holandesa -para la que también estaba trabajando- fue seguida en el centro porteño por una persona, que tras varias cuadras le advirtió «dígale a sus amiguitos que se comporten bien» porque de lo contrario deberían «atenerse a las consecuencias».
«Avisamos al Ministerio de Relaciones Exteriores y nos dijeron ‘si a ustedes les ocurre algo la final Argentina Holanda no se hace‘. Finalmente, no nos ocurrió nada, el escándalo hubiera sido terrible, pero al momento de salir del país, no lo hicimos por Ezeiza, nos fuimos por Mendoza», recordó Van der Putten sobre los días finales del mundial.
También rememoró la última cena con colegas y amigos antes de partir de Buenos Aires a quienes les preguntó si iban a quedarse en el país con los riesgos que ello implicaba. Ellos le contestaron que sí, que «no podía ser peor que ahora». Días después, leyó en los diarios que dos de ellos habían desaparecido.
Van der Putten coincidió con Barend en que «hicieron su deber como periodistas», que «era una obligación escribir lo que estaba pasando en Argentina» y que «nunca olvidará el rostro de esas mujeres» que, como dijo Barend, «fueron verdaderas heroínas».
Agenda
La agenda de los periodistas holandeses continuará este miércoles con una visita a la exEsma, donde serán recibidos por el Secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti; el jueves recibirán un diploma de honor en la Legislatura porteña, mientras que el viernes recibirán otro reconocimiento en el Salón Eva Perón del Senado de la Nación, entre otras múltiples actividades y entrevistas.
El reconocimiento a Barend y Van der Putten se suma a los homenajes «cruzados» realizados en Países Bajos el pasado agosto que contó con la presencia de la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, quien fue reconocida en la Corte Penal Internacional mientras que la Asociación de Abuelas reconoció a los periodistas holandeses en la residencia del embajador en La Haya. (Télam)